(Opinion) Cuando yo muera, no quiero que lloren




Cuando yo muera, vendrá mucha gente, traerán flores e intentarán consolar a mi familia. Estarán mis familiares del exterior e interior, aquellos que capaz le ví una vez en vida, pude haber sido un mal ciudadano, mal hijo, mal padre, mal trabajador, pero la muerte limpia pecados nunca mueren los malos.
Capaz me velen en un salón velatorio para no dejar mala imagen en mi casa, todos preguntando con aparente dolor "porque él, era tan bueno". Pero en vida faltaron los buenos días, las visitas, las felicitaciones por los logros, el consuelo en las desgracias, el te quiero, un que te mejores, entre otras cosas. En fin hay pequeñas cosas, pequeños detalles que marcan la diferencia para una persona golpeada, tener una mano de quién apoyarse o un "hola cómo estás" que te invite a seguir luchando y no pensar en partir del mundo.
En un mundo tan globalizado estamos tan deshumanizados, cada día más distantes que una buena conversación con otra persona es un artículo de lujo.Practiquemos la empatía, seamos cordiales, no abandonemos, demos las gracias, valoremos lo ir tenemos, pongámonos metas y no nos contaminemos con lo negativo, con un acto con una acción podemos ser un sostén a la gente que busca la manera de irse.
Cuando muera ya no me servirán las flores, ni lágrimas, ya no sentiré tu consuelo, ni tu comprensión, ya no me sentiré tu abrazo, hoy es el momento no esperes un mañana.